2022 marca dos décadas desde que Rhys Fulber llevó su vida de estudio más allá de los reinos de Delerium, con el LP homónimo, ‘Conjure One‘. Desde entonces, sus trabajos bajo este alias han sido casi un reloj en su sincronización y consistencia. A través de hitos de LP como ‘Extraordinary Ways‘, ‘Exilarch‘ y ‘Holoscenic‘, cada cinco años más o menos ha dado a los amantes de la música electrónica más exigentes algo que escuchar… y mucho en lo que sumergirse.
Si bien el título de ‘Innovation Zero‘ es algo irónicamente autocrítico, lo que no se puede negar es que Rhys encontró su lugar en las artes downtempo. Casi sin tener en cuenta las pistas de club y con un marcado enfoque emocional suntuoso al que añade su tapiz sónico, el Fulber que conocías entonces es en gran medida el que tienes hoy.
En diez números cargados de atmósfera, Conjure One antepone el estado de ánimo, el ambiente y el carácter a todo lo demás. Con la composición lírica conjunta de un pequeño pero dedicado grupo de vocalistas, y una técnica, un estilo y un sistema de producción sin medida, el creador de música de la persona pensante lo ha vuelto a hacer.
Razonablemente, el álbum abre con sus dos primeros sencillos. Entre el drama suave y mesurado de ‘Animals‘ cantado por Jaren y el hormigueo persistente de Jeza en ‘Wolves at the Door‘, los vocalistas arrojan sombras sobre ‘Innovation Zero‘ .
En todo momento, Jeza demuestra ser una musa vocal para Rhys. A lo largo de su número, el cantante nacido en el Reino Unido y radicado en los EE. UU. persigue una tormenta en no menos de cinco de sus pistas. «Signs of Life» y «Future Sight» equilibran hábilmente líneas líricas cristalinas con otras metafóricas más opacas, sembrando una curiosa sensación de optimismo en su melancolía tonal. Por el contrario, ‘Hide‘ y ‘Wheels Come Off‘ llevan sus experiencias desgastadas en la manga. Después de ‘Animals‘, la extraordinaria gama de la voz reconocible al instante y muy querida de Jaren hace una segunda aparición. En el punto medio de ‘Innovation Zero‘, lucha contra la esperanza de la desesperación con ‘I Don’t Want To Go There‘.
En sus últimas etapas, el álbum viaja a pastos más instrumentales. ‘Abkhazia‘ hace un bucle soñador de una armonía oriental sobre sus pausas downtempo, volviéndose nada menos que hipnótico durante su tiempo de ejecución. En un estilo similar, Leah Randi contribuye con sus tonos vocales a la majestuosa ‘Flood Tide‘, mientras que el desenlace de la canción principal del álbum, de ritmo glacial y estilo cinematográfico, le da a ‘Innovation Zero‘ su perfecto canto del cisne.
Mezclando atmósferas ambient con fracciones de electrónica y matices de breaks & progressive, una vez escuchadas, las evocaciones del quinto longplayer de Conjure One no se olvidarán pronto. Llega hoy y está disponible a través de https://blackhole.lnk.to/InnovationZero